Islandia es una isla del Atlántico norte, en donde la canción de hielo y fuego no se debe a un juego de tronos sino a la dinámica básica de la naturaleza. Muchísimo frío por la latitud extrema, muchísimo fuego por la lava que brota de sus entrañas.
330.000 habitantes en total. Menos de la mitad de los que hay en la ciudad que vivo, que tampoco es una ciudad TAN grande.
Quiero mostrarles algunos islandeses que hacen verdaderamente grande a su patria, gracias a la música.
De Solstafir ya hablamos en este blog, y con mucho entusiasmo. Es una banda que hace lo que se llama post metal, algo que puede significar casi cualquier cosa, pero que en casos como éste - o de los irlandeses de Primordial - es la manera de llamar a una música en extremo bella y emocionante, propicia al disfrute de oidos muy diferentes.
Un problemita en su nuevo disco es que se pelearon con el baterista, y lo echaron. Y el gordo Guðmundur Óli Pálmason, el célebre Gummi, no es fácil de reemplazar, y
se llevó con él algo esencial al sonido tan peculiar y formidable de esta banda, una de las mejores del presente para mi gusto, más allá de cualquier género.
2017 - Sólstafir - Berdreyminn
Yo encuentro una similitud entre lo que pasó aquí, y digamos, Pink Floyd y Roger Waters. Quien se va es tan genial que es capaz de hacer sólo algo igual o mejor que los que se quedaron.
El nuevo proyecto de Gummi se llama Katla, y parece más Solstafir que Solstafir, con un verdadero maestro en la percusión.
2016 - Katla. - Kaldidalur
2016 - Katla. - Dómadalur
Pero bueno, al igual que con Pink Floyd no hay mal que por bien no venga, y tenemos dos bandas extraordinarias en lugar de una.
Aquí los recordamos en vivo a todos juntos.
2014 - Sólstafir - Full Performance (Live on KEXP)
Y ya que estamos con Islandia, este exquisito recital de otra gran banda de ese país, con una orquesta y un coro sinfónicos, y la participación del GRAN cantante de Sólstafir como amigo invitado en una canción.
2013 - Skálmöld en vivo. (Si quieren una probadita antes de escuchar todo, pongan a los 30 minutos y griten conmigo ¡viva la música!).
Un saludo.
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